📌 Edición #3

📆 Agosto 2023

📌 Edición #3 📆 Agosto 2023

 

📸Luces altas del mes

Corriendo Comunidades Vibrantes 🎽


“Mire, parce. Usted divídala en tres partes”—me dice Carolina mientras caminamos entre la multitud. Había muchas cosas a mi favor: una ciudad vibrante, miles de personas, mi nueva bincha de pelícanos rosa, mis compañeras/os acelerando a mi lado y nuestros equipos afiliados colombianas/os motivadas/os.

El clima iba de arriba a abajo, desde un sol que quemaba la piel hasta refrescantes lluvias primaverales. Bogotá le dio la mano a un hondureño, porque sus curvas y pendientes eran crueles.

Supe desde el principio que de nuestro grupo, yo sería el último en terminar. Para Blair, Jorge y Carolina, esta no fue su primera lucha. Por otro lado, las/os afiliadas/os corrieron la carrera más corta de 10 km. Laura y yo corrimos 21 km, siendo primerizas/os, pero yo estaba más concentrado en la cámara GoPro que llevaba en el pecho. Quería registrar cada kilómetro.

0-7 km
“Primero, corra a un ritmo más lento del que entrenó”. —Las palabras de Carolina aún estaban en mi cabeza.

La carrera comenzó. Como un perro con dos colas, me moví de izquierda a derecha, queriendo grabar cada cartel que apoyaba a las/os corredores, chocando los cinco con cada mano que brotaba energía. Yendo yo a una velocidad súper lenta, vi a mi grupo sumergirse en la multitud del frente.

La única detrás de mí era Laura, que por culpa del tráfico salía en una de las últimas tandas.

Todo es color rosa y mariposas, videos y sonrisas, hasta que llegas a la tercera colina cerca de 5 km. Perdí completamente de vista a mis compañeras/os. Durante una pendiente terrible, disminuí la velocidad y aproveché para cambiar la batería de mi cámara. De repente, un viento pasó por mi hombro derecho y dijo: "Vamos, David, tú puedes". Laura agarró esa colina como si nada. ¿Cómo lo hizo? No solo en la carrera, sino su crecimiento en el liderazgo.

El día antes de la carrera, visitamos su Programa Escolar, Caja del Saber Integral. Todos las madres y padres más el personal estaban en una reunión hablando sobre los avances en sus niñas/os, cambios que se venían en el programa y luces altas. Al final de la reunión, Laura se preparaba para compartir. Yo sabía que su parte era invitar a todas/os a unirse a un programa de donantes mensuales, reclutar nuevas/os voluntarias/os y pedir nuevas/os seguidores en sus redes sociales.

¡Laura arrazó con todo! Parecía que había estado compartiendo visiones e invitaciones por años. Blair me miró y supe que estábamos pensando lo mismo. Al igual que esa colina por corrió como si nada, ella es una líder natural; las/os niñas/os colombianas/os bajo su guía están en buenas manos.

8-14 km
“Después de terminar la primera parte, vuelva al ritmo que entrenó todos estos meses.”—Escuché a Carolina cuando vi el cartel de 8 km.

Recordé que nuestras/os afiliadas/os de Tertulia Creativa estaban corriendo los 10 km.

Es increíble lo unido que puede ser ese grupo. Los mirás y sabés que no son solo compañeras/os de trabajo; son amigas/os. Van a la misma iglesia, son de la misma ciudad y tienen la misma edad.

La directora ejecutiva de Tertulia Creativa, Yolanda Rojas, tuvo algunos problemas familiares, y no pudo estar en Bogotá durante el último mes, y parece que no regresará pronto. Su equipo, sin embargo, está manejando el barco como capitanas/es. Primero hablé con Esteban y estaba lleno de coraje; no murmuró una palabra mientras hablábamos. Natalia me dio la misma confianza al día siguiente. Y cuando vimos a todo el equipo a cargo del programa con las/os niñas/os, vi la misma pasión que Yolanda tenía en su visión para Tertulia Creativa.

Esta gente no falla. Ya sea una carrera, si no sabes tus vocales o no puedes contar hasta diez, este equipo te echa una mano. No importa si eres un joven de 32 años en su primer maratón o un niño de 7 años con dificultades en la escuela, te esperarán en la línea de meta.

15-21 km
“Suena loco, pero aquí es donde das todo lo que te queda”.

A estas alturas, seguramente mi maestra estaba llegando a la meta. Mis piernas estaban en modo automático y ni siquiera estaba pensando en mi ritmo o respirando profundamente. Solo quería ver algunas banderas a cuadros, una cinta larga. Cualquier cosa que me dijera que podía morir en paz porque terminé mi primera media maratón.

Este es el momento en que tu mente pregunta: “¿Por qué nos inscribimos en esto?” ¿Por qué te levantabas todas las mañanas? ¿Cómo sabes que vas a terminar la carrera? ¿Cómo vas a impactar a tu comunidad? ¿Por qué crees que puedes cambiar la vida de estas/os niñas/os? ¿Cómo sabés que tendrás fondos para los programas? ¿Por qué seguir? ¿No has hecho lo suficiente?

“Nacimos para hacer esto”, respondí. Creemos en esta ruta, en esta carrera de la vida. Lideramos programas de transformación; corremos maratones; y superamos los obstáculos, si eso significa que una niña, un joven, tiene otra oportunidad en la vida. Restauramos lugares que están rotos. Somos creativas/os y nuestros corazones estallan con nuevas ideas. Aprovechamos cada oportunidad y exprimimos cada moneda para traer esperanza a nuestras comunidades.

Sabemos que uno puede correr más rápido solo, pero juntas/os llegamos más lejos. Nuestras/os afiliadas/os en toda América Latina, las/os niñas/os, las/os jóvenes, UrbanPromise Honduras, las/os directoras/es, todas/os luchamos por comunidades más vibrantes; es nuestra visión. Ustedes, fieles donantes, comparten el mismo fuego que nosotras/os. Gracias por unirte a nuestro maratón.